El ejercicio continuó al día siguiente, esta vez incluyendo colores. Mediante tres cartulinas (negra, roja y blanca), un par de pautas y mucha libertad de actuación, creamos una estructura en la que ambos módulos se combiansen creando un tejido.
Es asombroso lo que nuestra mente puede dar de sí, la variedad de estructuras tan dispares que aparecieron:
Por mi parte, solo puedo añadir que mi idea consistía en realizar un trama en la que ambos módulos se combinasen formando una unidad:
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